El artista coreano Do Ho Suh ha demostrado una vez más su talento a la hora de crear esculturas de grandes dimensiones, con su última creación de 7 metros llamada: “Karma”. En ella podemos ver una serie de hombres, en total 98, subidos unos encima de otros en los hombros, y tapándose los ojos mutuamente, que se alzan en el cielo simulando una escultura infinita que se funde con las nubes.
Para su trabajo el autor ha utilizado como material, el acero inoxidable fundido a través del cuál, los rayos del sol quedan reflejados aportando a la escultura una luminosidad especial. Esta pieza se exhibe en Sydney en el Walda Besthoff Sculpture Garden, en el museo de Nueva Orleans.
Anteriormente Do Ho Suh ya había creado piezas de gran envergadura, como un zapato gigante que parece pisar una multitud de pequeñas piezas o tornados de alambre.
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